REINOS OLVIDADOS: Viento de Acero

De Aventuras Infinitas
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Esta campaña es una continuación de "Sangre de Oro". PRELUDIO: Expande el desplegable para leer.

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En las lejanas y frías tierras de El Norte de Faerûn, se ha levantado una nueva amenaza contra las ciudades libres cercanas al bosque de Lurkwood.

Una criatura, mitad hombre, mitad orco, que se hace llamar El Rey Miserable, ha reunido bajo su mando a varias razas goblinoides, para controlar los caminos mercantiles y desequilibrar la economía de la zona con sucias tácticas comerciales. Trolls acorazados, orcos armados, trasgos montados y mercaderes sobornados socavan lentamente la autonomía de Mirabar, Longsaddle y Silverymoon, y erosionan de forma implacable las poblaciones cercanas a los reinos enanos de la Espina del Mundo.

Mientras los gobernantes de las ciudades libres pelean entre ellos sin llegar a ningún acuerdo de defensa común, algunos nobles han tomado la iniciativa y han contratado de forma individual a bandas de mercenarios para proteger sus caravanas.

La Casa Harpell de Longsaddle, la Casa Bayoblanco de Silverymoon y el Templo de las Cinco Bolsas de Waukeen en Mirabar han unido sus recursos para pagar los servicios de la famosa Compañía Roja, donde los Ángeles de la Muerte Erarich y su hermano Arafrid combaten bajo las órdenes de Sir John Blackstar, quien ha desatado una cruenta guerra de guerrillas contra El Rey Miserable.

Por otro lado, Andrea Perazzi de Aguasprofundas es invitada a la mansión Bayoblanco en Silverymoon para convertirse en la nueva hechicera de la poderosa familia, acompañada en su viaje por Gauldron Reinhart. Ambos nigromantes se encuentran en esta ciudad con Erarich, a quien Blackstar envía en misión de reconocimiento al pueblo de Snowstone donde se cree que hay agentes infiltrados de El Rey Miserable, y Gauldron le acompaña a petición de Érnice Bayoblanco, cabeza de la familia noble y mecenas de Andrea.

En Snowstone, el enano Thorek “Barba Gris” investiga la inexplicable presencia de trasgos y orcos en el pueblo, integrados y asimilados en su sociedad, sospechando que el clan Rumnaheim está implicado en esto de alguna forma. Erarich, Gauldron y Thorek, en su búsqueda de información, se conocen en La Posada del Aguardiente, donde intercambian lo que cada uno sabe entre susurros y tragos de licor.

Primera Sesión (20 de agosto de 2022)

30 de mirtul de 1487 CV

Poblado de Snowstone (Fuente: editado de https://2minutetabletop.com/steam-snow-mountainside-mine-dnd-supplement/)

Por la tarde, Thorek "Barba Gris" recibe en la Posada del Aguardiente de Snowstone a Gauldron Reinhart y a Erarich, que viaja con el pseudónimo de Fierástamus. Antes de la reunión, la hija del posadero, Fianna, se estuvo fijando en el enano y el emblema de su escudo. Los tres aventureros tuvieron como claro objetivo acercarse todo lo posible al Rey Miserable, utilizando para ello la tapadera de Erarich y contactando con Mel-Grund. Su plan consistía en ganarse primero la confianza del semiorco de Snowstone para luego llegar hasta su autodenominado monarca. Fianna pasea descaradamente cerca de ellos, pendiente del resto de la conversación que tuvieron los personajes. En la posada entran dos guardias de la milicia del pueblo, acompañando a tres semiorcos con rasgos ligeramente más orcos que humanos. Las otras siete personas que había en la posada se quedan en absoluto silencio cuando los ven entrar, sorprendidos y asustados. Los cinco recién llegados toman una mesa junto a la puerta, y lanzan miradas a los personajes, especialmente al enano. Gauldron les envía una botella de vino, y aunque los milicianos agradecen la invitación con un gesto y beben, los semiorcos no prueban ni un sorbo. Fianna, visiblemente disgustada, va de una mesa a otra, teniendo precaución de no llamar mucho la atención. Thorek, Erarich y Gauldron salen de la posada a ejecutar su plan, ante la atenta mirada de los cinco guerreros sentados junto a la puerta.

Ya ha anochecido, aun siendo la primera hora de la tarde, hace frío y hay luna llena en un cielo raso. Los tres salen al cementerio del pueblo, que no solo es muy rudimentario y está sin vallar, sino que, a juicio de Gauldron, nunca ha sido expoliado por saqueadores de tumbas o nigromantes, ya que todos los enterramientos están intactos. La mayoría de los difuntos son mineros de la época en la que Snowstone era una refinería, y hay una gran fosa común para los desconocidos que se encuentra tapada por una gran losa de piedra, colocada sobre unas guías para poder moverla. Cuando abren la fosa se dan cuenta de

Posada del Aguardiente (Fuente: Joyce (Zhuosi) Xu; https://www.artstation.com/artwork/oW0GO)

que es muy profunda, y está llena de cuerpos en sus dos terceras partes; el frío ha conservado muy bien los cadáveres, y no les cuesta encontrar entre los más recientes un joven con barba y pelo largo. Lo izan con una cuerda y le cortan la cabeza, para echar el resto en la fosa y colocar la losa de nuevo en su sitio. Erarich y Gauldron vuelven a la posada con la cabeza envuelta en telas, mientras Thorek se queda en el cementerio para cubrirse con harapos que encuentra cerca de una hoguera extinta, y utiliza el carbón para teñirse la barba de negro. Después, el enano se dirige hacia la posada con sus compañeros, pero por el camino escucha unas risas malignas que le ponen los pelos de punta y se acerca con cautela para ver qué son, descubriendo a un grupo de cuatro goblins con jarras de licor que descienden hacia el Barrio Bajo. Tomando nota de este hecho, se marcha silenciosamente. En la posada, Erarich y Gauldron suben a una habitación. El nigromante utiliza un cantrip para manipular la cabeza y descongelarla, haciéndola más maleable, y luego baja al salón, y el mercenario saca de su equipaje el casco de su armadura del Ángel de la Muerte y encaja dentro la cabeza cortada, lo coloca todo sobre la mesa y con el pomo de su espada golpea la cara del cadáver, haciéndola difícilmente reconocible. Deja el conjunto en su habitación y también baja al salón a tomar algo con su amigo. Erarich deja caer al posadero el rumor de que uno de los Ángeles de la Muerte ha sido asesinado, y que Sir John Blackstar está muy furioso y afectado por lo ocurrido.

Thorek está llegando a la posada, y una figura encapuchada alcanza la entrada al mismo tiempo que él. El enano, cortésmente, le deja paso, y cuando se abre la puerta el encapuchado se descubre dejando ver que es un orco auténtico. Entra fío. Los presentes se quedan petrificados por la presencia de un ser enemigo entrando impunemente en la posada. El Orco se acerca a la barra y pide aguardiente. Todo está muy tenso. Thorek se levanta y se pone al otro lado de la barra a beber algo, y Gauldron en el otro extremo. El posadero está muy asustado y tiene las manos permanentemente fuera de la vista. El enano da golpes en la barra pidiendo algo de beber y absolutamente todo el mundo se levanta sacando armas; el posadero tiene una ballesta mediana. La gente se calma y se sienta. Thorek es poseido por su ancestro Wor y tiene una visión del pasado:

Visión de Thorek poseído por Wor
"Thorek es Wor, hace mil años. Wor es el líder del Clan Rumnaheim, y su reino ha hecho un pacto de mutua defensa con los humanos del norte en la Espina del Mundo. Se encuentra en la sala de crisis junto a sus dos lugartenientes, porque los orcos les están atacando, apareciendo, inexplicablemente, por detrás de sus líneas defensivas. Una enana guardiana de los infantes aparece, herida, y dice que han sido traicionados por los humanos, quienes han estado albergando en sus propias casas a los orcos y goblins para emerger ahora y atacar, y han tomado como rehenes a muchos pequeños enanos y otros nobles. Sugiere a Wor la rendición, pero éste dice que realizarán un ataque total sobre trasgos y humanos. Sus lugartenientes le apoyan. La enana dice que si hacen eso muchísimos enanos morirán, pero Wor insiste en que es mejor morir en batalla que rendirse con deshonor, y no cederá a presiones incluso con rehenes. La enana obedece, y los lugartenientes marchan a dar las órdenes para realizar un ataque."
Escudo del Clan Rumnaheim

Los personajes invitan al Orco a sentarse en su mesa, ofrecimiento que acepta. Le dicen que quieren hablar con Mel-Grund y ofrecer sus servicios. El Orco mira a Thorek y pregunta si él también, reconociendo el emblema de los Hammerlung. Cuando el enano confirma su ofrecimiento, El Orco ríe, asiente y se marcha. Al poco, entra en la posada un hombre, vestido con prisa sobre su ropa de dormir, envuelto en una capa y con la cara sangrando, marcada por golpes. Pide aguardiente en la barra, y cuando el posadero le pregunta qué ha pasado, se pone a llorar. Gauldron se acerca a consolarlo, y éste le cuenta a todos que unos trasgos han entrado en su casa, le han echado y se han quedado dentro, reteniendo a su familia como rehenes. Uno de los clientes de la posada, un enano, preocupado por lo que ha oído, se levanta para marcharse, pero un semiorco le bloquea el paso poniéndose frente a la puerta, y el hombre se vuelve dócilmente hacia su sitio. El semiorco vuelve a sentarse. Erarich y Gauldron se acercan a la mesa de los dos milicianos y los tres semiorcos. Uno de los humanos, el más dicharachero, se presenta como Allan, y les agradece la invitación de antes. Ante la pregunta directa de qué está pasando aquí, Allan contesta que no ocurre nada, y se escucha en la lejanía un grito de mujer. El miliciano mantiene la sonrisa, pero dice que todo está en orden. Gauldron le dice que quieren hablar con Mel-Grund, y el miliciano se hace el loco, y aunque el nigromante utiliza un cantrip para que le brillen los ojos, el hombre parece tener más miedo de sus superiores que de aquel. Las amenazas veladas de Erarich y Gauldron consiguen amilanar a Allan, que ordena a uno de los semiorcos que vaya a por Mel-Grund, pero el semiorco le coge del cuello y le dice que vaya él mismo, y el miliciano, asustado, obedece. Abre la puerta y entra frío. Thorek intenta marcharse, pero el semiorco de antes se vuelve a levantar para cerrarle el paso, y entonces el enano entra en cólera y comienza a protestar, aunque el semiorco ni se inmuta. Entonces Thorek le lanza insultos en orco, y le dice que es "un feto de troll empalado". Por algún motivo, el semiorco se vuelve furioso y le ataca, y comienza un combate entre ellos. Gauldron lanza un conjuro de Sueño sobre la mesa de los milicianos, dejando fuera del área a Erarich, y se duermen el miliciano que quedaba (un gordo empanado y pusilánime) y los otros dos semiorcos. El semiorco de la puerta lanza un tajo a la cabeza de Thorek, que esquiva con facilidad agachándose, y le responde con un hachazo en el hombro izquierdo. El semiorco, herido, entra en pánico y huye. Thorek falla un segundo golpe y Erarich se lanza en un fondo para alcanzarle, pero también erra el golpe. El semiorco huye en la noche y no lo persiguen. Entra frío por la puerta. Gauldron pide a los presentes que aten y amordacen al miliciano y los otros dos semiorcos, y los ponen en una esquina, para pegarles una paliza. El miliciano gordo y estúpido paga por su rescate y se marcha, y las monedas que suelta son cuadradas y tienen el emblema del Clan Rumnaheim. El enano que quiso marcharse pero se acobardó le pregunta a Thorek que cómo es posible que las razas goblinoides hayan tomado el pueblo a las puertas de los reinos enanos bajo la montaña, y dice que sus congéneres no permitirían esto y subirían a la superficie para liberar Snowstone, que deberían avisarles. Thorek el espeta que si quiere que vaya él, y el enano contesta que él no es un guerrero, y no piensa ir. Después de esto, los parroquianos se van, en grupos, a sus casas. El enano, el nigromante y el mercenario se sientan en su mesa al otro lado de la posada. Se abre la puerta de nuevo. Entra frío. Aparece un hombre alto muy bien vestido. Es Fjall, el Gobernador de Snowstone. Tras el, y bajando la cabeza porque no entra por la puerta, entra un enorme semiorco de rasgos bastante humanos. Es Mel-Grund. Tiene una enorme hacha sobre su hombro. Cierra la puerta y la atranca. El Gobernador, sonriente, se sienta a la mesa con los aventureros, que le preguntan qué está pasando en Snowstone, a lo que él responde que no ocurre nada. Le dicen también que quieren hacer tratos con Mel-Grund. Fjall les contesta, igualmente sonriente, que el semiorco es su guardaespaldas, y que cualquier trato debe pasar primero por él mismo. Reconoce a Thorek, pero éste le dice que se llama Oke. Thorek, Erarich y Gauldron hacen caso omiso

Escudo del Clan Orco Ulrak

de las palabras del Gobernador, y Erarich se levanta y va a hablar directamente con Mel-Grund, mimguneando a Fjall. Mel-Grund mira fijamente a Erarich y espera pacientemente a que acabe el Gobernador, quien les hace una oferta ridícula para formar parte de la milicia, a cambio de una moneda de oro al mes, que sube a dos, porque el pueblo está en auge y tiene un gran porvenir, pero los personajes se ríen. Gauldron pide vino al posadero, y se lo ofrece a Fjall, el cual se niega a beber sabiendo lo que le puede pasar. Las sutiles amenazas de los aventureros le fuerzan a beber, y se levanta para caer desmayado. Mel-Grund se acerca y habla con ellos. Tiene el emblema del Clan Orco Ulrak. Erarich le dice que quieren ofrecer sus servicios de mercenarios al Rey Miserable, y le enseña el casco del Ángel de la Muerte con la cabeza dentro. Mel-Grund reconoce el casco y queda impresionado, preguntando a Erarich si lo mató él, y éste responde que sí, y que ahora mismo Blackstar está muy afectado y furioso por lo ocurrido. Al igual que El Orco, ríe ante la perspectiva de que un enano del clan Hammerlung quiera unirse al Rey Miserable. El enorme semiorco asiente, diciendo que todo el mundo es bienvenido en el ejército, y se marcha, arrastrando de una pierna a su patrón dormido. Gauldron ordena a Fianna que libere a los semiorcos amordazados. Todos se van a dormir, estando el pueblo tomado por las razas goblinoides.

1 de kythorn de 1487 CV

A la mañana siguiente, Mel-Grund va a buscar a los aventureros. Snowstone ha cambiado de la noche a la mañana, y semiorcos y trasgos están trayendo carretas con mercancías marcadas con emblemas de Mirabar, Silverymoon, Aguasprofundas, Luskan y otras ciudades libres, sin esconder nada ya. Los humanos del pueblo han sido esclavizados y están siendo forzados a construir nuevos almacenes. Montan al nigromante, el enano y el mercenario en un carro con otros semiorcos, entre ellos los que estuvieron anoche en la posada, y frente a Thorek se sienta el que hirió anoche. Bajan del pueblo hasta llegar, tras un día de viaje, a un angosto valle donde se ve desde la lejanía un ejército goblinoide, y conforme se acercan ven regimientos de orcos, trasgos y trolls, y en el centro unas carpas con banderines, las cuales salta a la vista que son de factura humana y han sido robadas o compradas. Todos los orcos miran sombríamente el carro porque Thorek va en él. Les hacen bajar donde las carpas, justo ante la más grande, y Mel-Grund les lleva hasta el Tal-Guruk, uno de los lugartenientes del Rey Miserable, que habla con una voz rasposa y tiene la lengua partida, haciéndola parecer bífida. El comandante semiorco les recibe rodeado de muebles lujosos, y está entusiasmado con que un enano se haya unido a sus filas. Examina el casco del Ángel de la Muerte con la cabeza dentro y parece convencido. Ererich recalca que La Compañía Roja ha sufrido un duro golpe y que Blackstar está muy furioso y afectado. Les explica que el Rey Miserable está formando grupos de búsqueda porque quiere encontrar un objeto, y hay lugares donde las razas goblinoides no pueden entrar. Aunque cuentan con una red de espías inflitrados en las grandes ciudades, lo que se está buscando puede estar en lugares recónditos, y ahí es donde los aventureros pueden ser útiles. No obstante, debido a su condición humana y enana, deben pasar por un sencillo rito de iniciación para que los trasgos, trolls y orcos los acepten entre ellos. Los acompaña fuera de la carpa mientras suenan tambores. Han preparado un cercado con estacas y orcos con lanzas rodeándolo. Una muchedumbre se ha congregado alrededor de la zona. Traen a tres hombres prisioneros, que Erarich reconoce como de la Compañía Roja. Tal-Guruk les explica que deben combatir con ellos y matarlos, y entonces serán aceptados. Les orfrece el armamento que deseen. Gauldron pide una máscara, y le dan una con aspecto oriental que representa un escorpión (lol), y Ereric pide otra. Se les suministran armas y armaduras a los otros tres hombres, y los seis entran en el cercado. En este momento crucial, los personajes se replantean su existencia y sus valores, y Erarich piensa que esto lo hace por cumplir su misión, por lo que su alineamiento cambia a Legal Neutral. Gauldron piensa en su propio interés, y cambia de Neutral Bueno a Neutal Malvado, y Thorek hará lo que sea por vengar a su clan, quedándose, de momento, como Caótico Bueno, pero se inclina hacia el Caótico Neutral.

Mientras los orcos, trolls y gonblins expectantes entran en frenesí ante el espectáculo, el combate da comienzo...